ALCOHOLISMO UNA PROBLEMÁTICA EN LA SOCIEDAD.
Por: Alondra Stefanía Alpuche Reyes
1ero A. Licenciatura en PsicologíaUniversidad Autónoma de Campeche.
REF: ACT012_PSICO1A
INTRODUCCIÓN
El siguiente proyecto tiene
como finalidad dar a conocer los problemas que adquieren tanto la persona
adicta y/o las que lo rodean,
con el fin de dar a conocerlo y así concientizar a las personas, para que tomen
una buena decisión ante el consumo de este.
El alcohol es la dependencia
de la persona a la ingesta de bebidas embriagantes, actualmente el alcohol se
encuentra categorizado como una de las peores drogas, por el gran porcentaje de
personas consumidoras de este. El alcoholismo es una problemática muy visible
en la sociedad, a diario es muy notorio encontrarse con personas alcoholizadas
en las calles, tratando de encontrar el medio para poder seguir bebiendo
La falta de conocimiento de la sociedad sobre esta
gran problemática es causante de que no se le dé la importancia debida, porque
esta enfermedad no solo afecta al alcohólico sino también a su familia, amigos,
compañeros de trabajo, etc. Por tal motivo si se realiza una buena concientización
de este, podremos reducir los índices de mortalidad y de enfermedades que este
ocasiona. Uno de los factores por el que el alcoholismo es considerado una
droga es porque las personas adictas a
él, son dependientes de su consumo y se encuentran en una rotunda negación de
su adicción con las típicas frases “lo dejo cuando yo quiero” “tomo cuando
quiero” “no necesito de él”.
El alcohol y las drogas
matan más personas que las pestes y las guerras. Lo grave de este flagelo es
que los mata después de destruirle su vida familiar, social y laboral. Bajo
este monstruo y debido a la presión social, el nivel sociocultural, los
complejos que tienen los hijos y la falta de dialogo familiar hacen que de
cierta manera, la mayoría de habitantes del planeta estemos a merced del uso de
sustancias. En este trabajo, encontraran
porcentajes de años cercanos, donde se ve reflejado el gran índice de
alcohólicos. México como uno de los primeros países en tener un alto índice de
personas adictas al consumo de bebidas embriagantes, cabe destacar que este indice se encuentra en constante aumento.
DESARROLLO
El alcoholismo consiste en un consumo excesivo
de alcohol, en forma prolongada con dependencia del mismo. Está considerado
como una enfermedad crónica producida por el consumo incontrolado de bebidas
embriagantes, lo cual interfiere en la salud física, mental, social y familiar,
así como en las responsabilidades laborales de la persona.
Existen personalidades que
relativamente tienden más al consumo:
- Quienes tienden al fracaso y se sienten despreciados.
- Aquellos que se sienten inseguros y que ven en el alcohol una forma de mostrarse diferentes ante los demás.
- Aquellos que no saben utilizar su tiempo libre
- Los que tienen conflictos con sus padres.
- Personas muy impulsivas y que viven siempre al límite.
- Los estudios indican que los hombres jóvenes con padres alcohólicos responden al alcohol de un modo diferente de aquellas personas sin una historia familiar.
- Los adolescentes con antecedentes familiares de alcoholismo tienen mayor probabilidad de empezar a beber antes de los 19 años y de volverse alcohólicos.
- Cualquier persona que empieza a beber en la adolescencia está en mayor riesgo.
- Entre más temprano empiezan a consumir, más aumenta el riesgo del abuso de drogas.
Las
personas que sufren de alcoholismo o de abuso de alcohol con frecuencia:
- Siguen bebiendo, aun vean afectada la salud, el trabajo o la familia.
- Beben solas.
- Se vuelven violentas cuando beben.
- Se vuelven hostiles cuando se les pregunta por la bebida.
- No son capaces de controlar la bebida: son incapaces de suspender o reducir el consumo de alcohol
- Inventan excusas para beber.
- Faltan al trabajo o al colegio o tienen una disminución en su desempeño debido a la bebida.
- Dejan de formar parte en actividades debido a su consumo.
- Necesitan consumir alcohol la mayoría de los días para lograr pasar el día.
- Se descuidan para comer o no comen bien.
- No les importa o ignoran cómo están vestidos o si están limpios.
- Tratan de ocultar el consumo de alcohol.
- Tiemblan en las mañanas o después de períodos sin beber un trago.
Los
signos de la dependencia del alcohol abarcan:
- Lapsus de memoria (lagunas) después de beber compulsivamente.
- Una necesidad creciente de más y más alcohol para sentirse embriagado.
- Síntomas de abstinencia alcohólica cuando no se ha tomado un trago por un tiempo.
- Enfermedades relacionadas con el alcohol, como hepatopatía alcohólica.
En la actualidad el
incremento de jóvenes que consumen bebidas alcohólicas, aumenta al paso de los
años. La actitud de los jóvenes viene dada por carencias personales que tendrán
que analizar las personas especializadas para poner intervenir en el enfermo y así
poder entender un poco más su situación.
Los que lidian día a día con
la realidad del alcoholismo en las asociaciones o centros de tratamiento,
Los patrones de consumo
entre la gente joven son muy conocidos; beben los fines de semana o en fiestas
y siempre fuera del ámbito familiar. Generalmente en la calle o en habitaciones
con los amigos. Pero además la pronta edad en el inicio del consumo, es entre
los 12 años y medio, preocupa porque conlleva a la iniciación en el consumo de
otras drogas.
Los jóvenes en proceso de
rehabilitación enumeraron los motivos por los que recurren al consumo de
alcohol: Olvidar, tener más energía, poder hablar más (“valor”), pasarla bien,
relacionarse mejor (ser popular), ligar o ser más divertido o simplemente solo
querer llamar la atención.
La perspectiva de los
profesionales no se aleja mucho de esas respuestas. Para poder ayudar en la
recuperación será imprescindible analizar los factores genéticos, el modelo
paternal, la educación de los padres, el apoyo de la familia, así como los
factores sociales a los que ellos hacen referencia y la presión de grupo.
Muchas investigaciones científicas han demostrado que los
factores genéticos tienen influencia sobre el alcoholismo. Estos
descubrimientos demuestran que los hijos de padres alcohólicos son hasta cuatro
veces más propensos a desarrollar problemas con el alcohol que el resto de la
población en general. Sin embargo, el alcoholismo no se determina solamente por
la composición genética heredada; de hecho más de la mitad de los hijos de
padres alcohólicos no llegan a serlo.
La predisposición genética ayuda a determinar los patrones y
los resultados del consumo de alcohol. La genética participa en:
- Metabolismo respecto del alcohol.
- Variación de sensibilidad respecto de la dependencia.
- Respuestas psicológicas al consumo de alcohol.
Otras determinantes para el consumo del alcohol son las
características individuales de la persona (por ejemplo: edad, rasgos de la
personalidad y salud mental, expectativas respecto al alcohol, etc.), factores
sociales y económicos, y determinantes ambientales.
Los rasgos de la personalidad se
relacionan con el desarrollo de patrones de consumo de alcohol e influyen sobre
la conducta. Tanto entre los jóvenes como entre los adultos, existe una
tendencia hacia la toma de riesgos, la impulsividad y la búsqueda de
sensaciones relacionadas con el consumo de alcohol frecuente y excesivo.
También se le ha relacionado
con la dependencia “bajo control”,
desorden de conducta, agresión y depresión; Los desórdenes problemáticos de la personalidad,
tal como conducta antisocial han sido correlacionados con la dependencia de
alcohol. Según algunas investigaciones, la concomitancia
(simultaneidad del abuso de alcohol y problemas de salud mental) puede ser del
50% para estos problemas.
Entre los jóvenes, se estima que
aproximadamente el 60% de las personas con problemas de abuso de sustancias
también presentan trastornos psiquiátricos especialmente ansiedad, depresión y
baja autoestima. La evidencia indica una relación genética entre ciertos trastornos
psiquiátricos y la susceptibilidad al alcohol.
Los
patrones y los resultados del consumo del alcohol se relacionan con la
condición socioeconómica de una persona, incluyendo el empleo y nivel de
ingresos, es decir el estatus social en el que se desempeñan. Existen estudios
que sugieren una relación entre ser un bebedor frecuente, el nivel de educación
y los ingresos de la persona.
Los
bebedores moderados generalmente tienen una condición socioeconómica superior
que los bebedores excesivos y padecen menos problemas con el alcohol.
En
las personas sin hogar (también llamados vagabundos) se ha reportado mayor
índice de abuso de alcohol, que en la población en general. Los vagabundos son
personas que tienen un nivel extremo hacia la dependencia del alcohol, estas
personas alguna vez tuvieron una familia, una casa y amigos, pero ahora
prefieren vivir en las calles.
La
estructura familiar durante la niñez o la adolescencia afecta el consumo de
alcohol por parte de los jóvenes; las personas con lazos familiares y amorosos
(entiéndase por esto la pareja) más fuertes son menos propensas a ser
influenciadas por amigos y están mejor capacitadas para evitar el consumo.
Las
relaciones e influencias de los amigos son determinantes importantes de la
conducta en el consumo de alcohol, especialmente en jóvenes. Los hombres son
más influenciados por amigos que las mujeres; las personas cuyos amigos beben
en exceso suelen ser bebedores excesivos, ya que la convivencia entre ellos es
siempre con “una copita”
La
presencia de una red social de familia y de amigos brinda una estructura de
apoyo que ofrece protección, ya que en el caso de los jóvenes los padres pueden
estar al tanto de los acontecimientos y actitudes que toman ante situaciones en
específicos sus hijos y así intervenir
en estos casos.
Cuando la persona en riego de caer en el
alcohol tiene una autoestima baja, es muy probable que este sea influenciado
por amistades o hasta por la propia familia (tíos, hermanos, papá, etc) a que
este ingiera alcohol con el fin de festejar o tratar de pertenecer a ese grupo que le ofrece
“apoyo”.
Entre
las relaciones sociales podemos incluir el aspecto religioso, ya que este en la
mayoría de las personas presenta una gran influencia en la manera de actuar y
pensar, esta influencia es más notable en adultos pertenecientes de
asociaciones creadas por su propia religión (por ejemplo, un grupo de
adoradores, grupo familiar, coro, etc).
Hablar de alcohol en México
lleva inevitablemente a asociarlo con fiestas, diversión y convivencia. En
México no se concibe una celebración sin el consumo de bebidas alcohólicas, los
mexicanos siempre encuentra un motivo para festejar con alcohol.
Sin embargo, quienes lo
consumen, sueles restarle importancia los otros aspectos a los que este
conlleva: la que se asocia al beber sin moderación, y como consecuencia de este
exceso, la diversión, la fiesta o convivencia, suele derivar en enfermedades,
accidentes, violencia, discapacidad, ausentismo o disminución del rendimiento
laboral y escolar. Pero lo que aún es peor es que, el problema no es el consumo
de la bebida, sino la frecuencia con que se ingiere.
En el 2010 México fue considerado entre los
países de mayor riesgo en el mundo por su frecuencia de consumo, que abarca a
unos 16 millones de bebedores, aproximadamente. El consumo de esta bebida causa
aproximadamente 2 millones 500 mil muertes cada año, basándose en los datos
adquiridos en los año 2011-2012.
El alcoholismo, a diferencia
de lo que se piensa generalmente, no es el único problema relacionado con gran
cantidad de alcohol que se ingiere en cada ocasión, ya que existe una gran
diversidad de consecuencias asociadas. Entre ellas, destacan la intoxicación
alcohólica que provoca deterioro psicomotor en el equilibrio y movimiento,
retardo en el tiempo de reacción, deterioro del juicio, cambios emocionales, así
como menor capacidad de respuesta a las
expectativas sociales, lo que contribuye al riesgo de violencia hacia los demás
y el daño intencional autoinfligido.
La violencia en la pareja
todo comportamiento que, en una relación conyugal, cause perjuicio físico,
psicológico o sexual a quienes mantienen esa relación. Comprende actos de
agresión física (abofetear, golpear, patear), maltrato psicológico
(intimidación, denigración o humillaciones constantes), relaciones sexuales
forzadas o cualquier otro comportamiento controlador (aislar a una persona de
sus familiares y amigos, vigilar sus movimientos y restringir su acceso a la
información o a la ayuda). El consumo de alcohol, sobre todo de carácter nocivo
o peligroso, es uno de los principales factores de riesgo de violencia de
pareja, y las relaciones entre ambos fenómenos son numerosas
Se ha constatado en muchos
países que el consumo de alcohol está estrechamente ligado a la violencia
infligida por la pareja. Las pruebas indican que dicho consumo incrementa la
frecuencia y la gravedad de los actos de violencia doméstica. Se ha discutido a
menudo que el alcohol sea causa directa de este tipo de violencia, basándose
para ello en la existencia de otros factores (como un bajo nivel socioeconómico
o una personalidad impulsiva) que explicarían la presencia de ambos, o bien en
que el consumo frecuente de grandes cantidades de alcohol puede generar una
relación de pareja infeliz y llena de tensiones, que eleva el riesgo de
conflicto y violencia. Sin embargo, hay pruebas que respaldan la idea de que
alcohol y violencia de pareja están relacionados:
v El
alcohol afecta las funciones cognitivas y físicas y reduce el autocontrol.
v El
consumo de alcohol por una de las partes de la pareja puede causar problemas
económicos.
v La
creencia individual y social de que el alcohol genera agresividad puede alentar
a comportarse violentamente después de haberlo consumido (excusa de su
comportamiento).
v Se
víctima de violencia puede producir consumo de alcohol.
v Los niños
que son testigos de actos y amenazas de violencia entre sus padres tienen más
probabilidad de iniciarse en el consumo nocivo de alcohol.
En México, el alcoholismo
representa la cuarta causa de mortalidad entre la población: primera en los
hombres (por cirrosis, accidentes y lesiones, enfermedades mentales y del
corazón) y la séptima en mujeres (mayormente por cirrosis hepática).
Es alarmante que un gran
porcentaje de adolescentes este bebiendo con esta frecuencia de consumo,
imitando a los modelos adultos y la probabilidad de avanzar hacia el
alcoholismo es mayor cuando se inicia en esta etapa. La intoxicación alcohólica
en adolescentes nos lleva a los riesgos en su comportamiento, que principal
mente lo observamos en: violencia, accidentes y embarazos no deseados, etc. Es
de señalarse que el 60% de los accidentes automovilísticos, en donde están
involucrados los adolescentes, están relacionados con el consumo de bebidas
alcohólicas. Causa la muerte de 320 mil jóvenes de entre 15 y 29 años de edad,
lo que representa un 9% de las defunciones en ese grupo de edad.
De acuerdo con estadísticas
oficiales, en México se cometen alrededor de 3 mil homicidios al año entre
familiares y conocidos cuando consumen bebidas alcohólicas. La violencia de
pareja también es frecuente. Una mujer tiene mayores probabilidades de ser agredida,
asesinada o violada por su pareja, cuando está ha consumido alguna bebida
embriagante.
El consumo diario de alcohol
es poco frecuente entre la población mexicana, solo 8 de cada mil personas
consumen todos los días, ese tipo de consumo es más frecuente entre los hombres
en una proporción de 7.5 hombres por cada mujer y se incrementa con la edad. El
consumo aproximado en promedio en nuestro país es de 7.7 litros y la cerveza es
la bebida de preferencia de la población.
La forma de consumo de
alcohol típica en la población mexicana es de grandes cantidades (5 copas o más
para hombre y 4 copas o más para mujeres) por ocasión de consumo. Casi 27
millones (26 millones 828 mil 893) de personas de entre 12 y 65 años beben con
esta frecuencia, entre menos de una vez al mes y diario; indicando que aunque
no beben con regularidad, cuando lo hacen, ingieren grandes cantidades, lo que
evidentemente genera inmediatos riesgos para la salud, seguridad, pero solo del
consumidor sino también la de otros. Por otro lado, casi 4 millones (3 millones
986 mil 461) de personas beben grandes cantidades de alcohol una vez a la
semana o con mayor regularidad. Este tipo de consumo es más frecuente entre los
hombres (6 hombres por cada mujer). El estado de Campeche ocupa
el octavo lugar en hombres y el tercero en mujeres en el consumo del alcohol,
en relación en consumo en los estados de México (véase anexo tabla 1).
Mundialmente, el alcohol es
causante de más de 60 tipos de enfermedades entre las que destacan:
- Cirrosis hepática.
- Desordenes neuropsiquiátricos.
- Diabetes mellitus.
- Cáncer.
- Daños en el corazón, hígado, estómago y sistema nervioso.
- Causa desnutrición y anemia.
En la mujer, durante el
embarazo puede producir daños irreversibles en el bebé, como:
- Deformidades de cráneo y cara.
- Retardo físico y mental.
- Bajo peso al nacer.
En México la mayor parte de
los problemas reportados se asocian a la condición de abuso más que con la
dependencia, sin embargo, ambo trastornos tienen consecuencias negativas en la
salud:
El abuso y la dependencia
del alcohol se asocian con dificultades frecuentes con la familia, problemas
con la policía, detención de personas estando bajo los efectos del alcohol,
problemas laborales y pérdida del empleo.
En los Centros de
Tratamiento de Menores, la droga de impacto más frecuente a nivel nacional
entre las personas que buscan ayuda especializada, fue el alcohol.
El Consejo Tutelar de
Menores reporta cada año que del total del grupo de menores de edad que son
detenido por cometer infracciones, el 54.3 % menciono consumir drogas de forma
habitual, dentro de este grupo el alcohol fue la segunda droga más utilizada
con un 20.95% (porcentajes tomados del 2008).
El Servicio de Urgencias
Hospitalarias, registro 17 mil 734 ingresos en 2008, de estos, quienes
sufrieron lesiones por causa extrema el 8.3%, se encontraba bajo el efecto de al menos una
sustancia psicoactiva al momento del ingreso. La sustancia mencionada con mayor
frecuencia fue el alcohol.
El 9% del total de
enfermedades en México las genera el consumo de alcohol.
Se estima que casi la quinta
parte de los accidentes laborales se relacionan con la ingesta de bebidas
alcohólicas y se encuentra entre las 10 principales causas de discapacidad
entre los trabajadores, que afecta directamente la productividad del empleado.
Por todas estas razón es por
lo que se le considera a las bebidas alcohólicas una de las peores drogas que
existe, ya que las enfermedades físicas internas aunque son percibidas a largo
plazo, la ingesta de estas en consumo constante es una circunstancia de la cual
el enfermo no decide aceptar su situación y hacer algo por su salud ninguna
persona lograra ayudarlo.
Para prevenir el alcoholismo
se debería apoyar a la ciudadanía impartiendo pláticas de como orientar a las
personas alcohólicas que tengan el propósito de alejarse de las bebidas
embriagantes. En los adolescentes las pláticas se deberán impartir en las
escuelas, pero estas pláticas deberán explicarles de una manera más informal
para poder llamar la atención de los jóvenes. Una buena propuesta seria que se
le incremente el IVA a las bebidas alcohólicas.
CONCLUSIÓN
Es importante la información y orientación para
formar en el adolescente y adultos una posición firme y determinante en contra
del consumo de bebidas alcohólicas.
Para concluir el alcoholismo es un problema social que surge en muchas ocasiones por presión de los "amigos", porque así los adolescentes creen estar en la onda, o moda. Otro problema que influye, son los problemas personales (con la familia, la sociedad, etc.), y sobre todo con ellos mismos. Estos problemas en la mayoría de los casos ocasionan una baja autoestima y depresión en el enfermo (alcohólico).
Así mismo puedo decir que si uno tiene fuerza de voluntad y si quiere, puede dejar de tomar, con ayuda de expertos, tratamientos, centros de apoyo y sobre todo comprensión de la familia. El alcohol es considerado una droga porque pueden causar o empeorar una gran cantidad de problemas médicos.
Es común durante los primeros meses de recuperación del alcohólico que sufra cambios de temperamento tales como irritabilidad, rabia, depresión y ansiedad, insomnio (dificultad para dormir) y problemas con la función sexual
El alcohol es una de las peores drogas que puede
existir porque la mayoría de las personas lo ven como algo necesario para
festejar y reunir a la familia
Para finalizar cabe destacar que el alcohol es el
causante de muchos accidentes automovilísticos, y aunque les suene aburrido
¡tomar hace daño, cuide su salud !
ANEXOS
TABLAS
Anexo tabla 1
|
HOMBRES
|
MUJERES
|
||
|
Nayarit
|
17.5
|
Querétaro
|
3.7
|
|
Zacatecas
|
15.7
|
Distrito
federal
|
3.2
|
|
Morelos
|
14.9
|
Campeche
|
3.0
|
|
Puebla
|
14.8
|
Nayarit
|
3.0
|
|
Michoacán
|
14.4
|
Morelos
|
2.8
|
|
Querétaro
|
14.1
|
Aguascalientes
|
2.5
|
|
Aguascalientes
|
13.8
|
Jalisco
|
2.3
|
|
Campeche
|
13.2
|
Estado
de México
|
2.2
|
|
Hidalgo
|
12.2
|
Baja
California S.
|
2.1
|
|
Quintana
Roo
|
12.0
|
Guerrero
|
2.1
|
|
San
Luis Potosí
|
11.8
|
Hidalgo
|
2.1
|
|
Tamaulipas
|
11.6
|
Zacatecas
|
2.1
|
|
Tlaxcala
|
11.2
|
Michoacán
|
2.0
|
|
Durango
|
11.1
|
Quintana
Roo
|
1.8
|
|
Oaxaca
|
10.9
|
Tabasco
|
1.8
|
|
Guerrero
|
10.4
|
Durango
|
1.7
|
|
Veracruz
|
10.2
|
Sonora
|
1.7
|
|
Estado
de México
|
9.7
|
Nacional
|
1.7
|
|
Nuevo
León
|
9.7
|
Coahuila
|
1.5
|
|
Nacional
|
9.7
|
Colima
|
1.5
|
|
Jalisco
|
9.3
|
Veracruz
|
1.5
|
|
Tabasco
|
9.2
|
Puebla
|
1.4
|
|
Sinaloa
|
9.1
|
Chihuahua
|
1.1
|
|
Chihuahua
|
8.5
|
Tlaxcala
|
1.1
|
|
Distrito
Federal
|
8.3
|
San
Luis Potosí
|
1.0
|
|
Baja
California S.
|
8.2
|
Tamaulipas
|
1.0
|
|
Sonora
|
7.7
|
Yucatán
|
1.0
|
|
Coahuila
|
7.5
|
Sinaloa
|
0.8
|
|
Yucatán
|
6.1
|
Baja
California
|
0.6
|
|
Colima
|
4.6
|
Chiapas
|
0.6
|
|
Chiapas
|
4.5
|
Oaxaca
|
0.6
|
|
Guanajuato
|
4.3
|
Guanajuato
|
0.5
|
|
Baja
California
|
2.4
|
Nuevo
León
|
0.3
|
Fuente: Quinta Encuesta
Nacional de Adicciones, SS, CONADIC, INPRFM, INSP
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