“Bullying
en las escuelas”
Por: Linsay
Vianey Berzunza Rivera
1 ero. "D"
Facultad de Humanidades
C. Licenciatura en Psicología
REF. ACT012 _PSICO (D)
UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE CAMPECHE
Introducción
En
la actualidad, en nuestra sociedad y más concretamente en las escuelas se ha
estado presentado un problema denominado “bullying”. La palabra bullying es de
origen holandés y es usado para describir el acoso escolar.
El
bullying se basa en el maltrato psicológico, físico y/o verbal practicado por
estudiantes de forma repetida a lo largo de un tiempo determinado caracterizado
de una diferencia de poderes.
Los
protagonistas del bullying suelen ser niños y niñas preadolescentes y
adolescentes. Los atacantes imponen temor e intimidan a la víctima mostrando
superioridad no siempre real.
Los
agresores pueden presentarse de diversas maneras las cuales pueden ser físicas,
por medio de empujones, golpes o robos; verbales, atreves de insultos y/o
amenazas; relacional, presentado con la exclusión social, la discriminación,
generación de rumores; y de forma digital, que aprovecha la tecnología para
hacer agresiones y hostigamiento vía web o atreves de los celulares.
La
victima puede desarrollar problemas psicológicos en un futuro, trastornos
emocionales, alimenticios y en casos extremos hasta el suicidio. La mayoría de
las veces no es solamente un atacante, sino que se reúnen grupos de niños
apoyando ese tipo de violencia.
El
bullying en las escuelas primarias se está convirtiendo en una de las
preocupaciones centrales de los maestros y padres de familia, los cuales han
emprendido acciones para fomentar y fortalecer los valores universales, así
como las actitudes asertivas entre los miembros de la comunidad educativa,
buscando con ello frenar este problema que nos aqueja a nivel mundial.
¿Qué es el bullying?
Bullying
es una palabra que viene del vocablo holandés que significa “acoso”. El primero
en definir este fenómeno fue dan Olweus, profesor de psicología y considerado padre
del concepto “BULLYING” donde define el hostigamiento o acoso escolar como: “la
situación de acoso e intimidación, en donde un estudiante es agredido o se
convierte en victima cuando está expuesto, de forma repetida durante un tiempo,
a acciones negativas que lleva a cabo otro estudiante o varios de ellos”.
El
bullying consiste en el maltrato o intimidación entre escolares, casi siempre
lejos de la mirada de los adultos, con el fin de humillar a una persona
indefensa mediante la agresión física, verbal y/o psicológica.
El
bullying es un tipo de violencia difícil de identificar ya que suele permanecer
oculta casi siempre para los adultos. El agredido suele ser una persona con
rasgos personales característicos o peculiares (alumnos nuevos, distinta
cultura, aspecto físico diferente,…) quien lo sufre suele estar en una
situación de inferioridad y como consecuencia suele aparecer la inseguridad. El
agresor hace un desequilibrio y abuso de poder, lo que impide que la persona
agredida pueda salir de la situación.
Los
estudios que han realizado acerca del bullying en las escuelas señalan que
tener amigos y ser aceptado son factores protectores frente a dicho fenómeno.El
bullying se ha convertido en objeto de estudio e intervención prioritaria
durante la última década
Se
le llama Bullying cuando un alumno es molestado constantemente en formas
desagradables e hirientes.
Pero
no se le llama Bullying cuando se molesta en una forma amigable y juguetona.
Tampoco es Bullying cuando dos estudiantes de más o menos la misma fuerza o poder
discuten o pelean. Muchos investigadores han definido claramente que para
llamar Bullying al fenómeno de agresión, debe existir diferencia de poderes en
donde obviamente la víctima es menos poderosa que su agresor.
La
distinción es importante porque ser atacado por una persona o un grupo de
personas más poderosas deja un sentimiento de desamparo más marcado que la agresión
entre dos personas en igualdad de poder, el Bullying es un abuso que aplica un
grupo de personas contra una víctima o víctimas específicas y que tiene como
objetivo humillar y controlar al alumno o grupo abusado. El acoso escolar
inicia desde el kínder, se intensifica en la primaria y decae en la secundaria.
Causas del bullying:
Las
causas de este fenómeno de bullying o acoso escolar son múltiples y complejas.
Existen en nuestra sociedad, ciertos factores de riesgo de violencia, como la
exclusión social o la exposición a la violencia a través de los medios de
comunicación.
§ La
agresión o maltrato físico se refiere al acto mismo de atentar contra la integridad
física de la víctima, puede dividirse en directa cuando se refiere a golpes y
patadas o indirecta cuando la agresión va dirigida a sus pertenencias, como
robar, esconder o romper sus objetos.
§ La
agresión o maltrato verbal es el tipo de agresión expresada a través de la
palabra, también puede dividirse en directa e indirecta; generalmente se
expresa por insultos, apodos, gritos, burlas crueles acerca de la víctima,
aspecto físico, origen étnico o anomalías visibles.
En un niño la agresión verbal es más
significativa que en un adulto, porque él no tiene aún la noción clara de su
personalidad y debido a que está en búsqueda de ella, la agresión verbal puede
causar confusión entre cómo “debería ser” y cómo “es”, el abuso verbal es común
en la sociedad actual.
Hay 15
tipos de agresión verbal y sus consecuencias pueden no ser notorias a simple
vista, pero una víctima expuesta a este tipo de abuso puede llegar a
desarrollar un trastorno depresivo.
Las
categorías de abuso verbal son contener, contradecir, despreciar, ataques
disfrazados de chiste, bloquear y desviar, acusar y culpar, juzgar y criticar,
destruir, amenazar, insultar, olvidar, ordenar, negar y manifestar ira abusiva.
La exclusión social hace referencia al acto a través del cual la víctima es
separada del grupo en determinados aspectos o en todos; su división entre
directa e indirecta toma características de excluir, no permitir participar,
ignorar y menospreciar, respectivamente.
§ La
exclusión social es una conducta inherente al ser humano, pues cuando una
persona no encaja entre las pautas del grupo es excluida. En el transcurso de
la historia se ha encontrado la exclusión en diferentes tipos de grupos
humanos, desde los religiosos hasta en las organizaciones de trabajadores,
siempre cumpliendo la función de asegurar la unidad grupal.
En
la escuela, el acoso escolar se usa para castigar a quien no cumple con los
criterios impuestos, generalmente, por el líder. Este tipo de agresión es más
común en las niñas que en los niños.
En
la adolescencia, cuando los individuos están aprendiendo a socializar, ser
rechazado por el grupo puede resultar atroz, la mayoría de las veces los lleva
a la depresión, abuso de alcohol y drogas. Agresión grupal cuando la agresión
se genera por dos o más niños, es considerada como una agresión social. En
nuestra sociedad es importante reconocerla por las implicaciones que tiene. Los
agresores son populares en primaria pero empiezan a ser aislados del grupo
mientras avanzan los grados y esto los obliga a reunirse para formar bandas de
agresores.
Modelos que forjan el comportamiento del
alumno:
Sin
embargo, carecemos de ciertas condiciones protectoras que podrían mitigar los
efectos de los dichos factores, como modelos sociales positivos y solidarios,
contextos de ocio y grupos de pertenencia constructivos o adultos disponibles y
atentos para ayudar.
Ø La
familia son los primeros modelos de comportamiento que tienen una gran
influencia, cuando los niños están expuestos a la violencia familiar, pueden
aprender a ver el mundo como que si solo existieran dos papeles: agresor y
agredido. Por ello, pueden ver la violencia como la única alternativa a verse
convertido en víctima.
Una
situación de maltrato del niño por parte de los padres contribuye a deteriorar
la interacción familiar y el comportamiento del niño en otros entornos, disminuye
la posibilidad de establecer una buena relación y tiende a repetir
cronológicamente lo de su familia haciéndolo más grave. Un importante factor de
riesgo de violencia familiar son las condiciones de pobreza y dificultades que
de ella se derivan, ya que estos aumentan el estrés de los padres, que muchas
veces es superior a su capacidad para afrontarlo. Por eso, son necesarias
acciones encaminadas a mejorar las condiciones de vida de familias en graves
dificultades económicas.
Ø Otro
modelo de comportamiento es el entorno escolar, muchas veces escuchamos a los
estudiantes quejarse “de que el profesor está en contra mía” y tendemos a
pensar que es una excusa para justificar una mala nota o una represión. Sin
embargo, conviene prestar atención porque estas protestas pueden tener
múltiples causas: insatisfacción con la asignatura, con la personalidad del
profesor o la manera en que está planeado el sistema educativo; pero también
puede ser señal de una necesidad de
mayor atención por parte del profesor y padres de familia.
A
menudo los profesores se crean expectativas, positivas o negativas, respecto a
sus alumnos e interactúan en público con los estudiantes de expectativas
positivas. Esto da como resultado que haya un grupo pequeño de estudiantes
“brillantes” que intervienen casi siempre y otro grupo de estudiantes más
“lento” que no participa casi nunca. Además, los estudiantes de altas
expectativas suelen recibir muchos
elogios y los de bajas expectativas, muchas críticas.
Así, la motivación de estos últimos disminuye
y se sienten discriminados respecto al resto de la clase. Pero esto puede ser
peligroso, ya que una mala relación entre el profesor y el estudiante puede ser
causa de ansiedad y depresión entre los chicos y chicas, así como de un
descenso de su rendimiento escolar.
Ø Un
modelo de comportamiento también son los medios de comunicación, sobre todo la
televisión, los exponen continuamente a la violencia, tanto real (telediarios)
como ficticia (películas o series), y por eso son considerados como una de las
principales causas que originan la violencia en los niños y hasta en jóvenes,
también los juegos de video los acerca mucho a la violencia ya que están
basados en guerras y peleas y esos son los principales regalos que los padres
suelen darle a sus hijos. La repetida exposición a la violencia puede producir
cierta habituación, con el riesgo de considerarla como algo normal, inevitable
y de reducirse la empatía con las víctimas. Es importante promover en los niños
la reflexión respecto a la violencia que nos rodea.
Participantes en el bullying:
Los
participantes del bullying se dividen en tres: agresor, víctima y observadores.
El agresor suelen ser impulsivos, dominantes, con conductas antisociales y poco
empáticos con sus víctimas. De los agresores también se pueden dividir en tres
tipos y son:
·
Acosador intelectual es aquel que con buenas
habilidades sociales y popularidad en el grupo, es capaz de organizar o
manipular a otros para que cumplan sus órdenes. Un ejemplo seria: Un grupo de
chicos es manipulado por una chica incitando a los chicos hacer lo que ella
quiere, otro seria sheldon (The big bang theory) el chico inteligente que
manipula a sus amigos como él quiere.
·
Acosador poco inteligente: es aquel que
manifiesta un comportamiento antisocial y que intimida y acosa a otros
directamente, a veces como reflejo de su falta de autoestima y de confianza en
sí mismo. un ejemplo seria: Un chico abusivo en
su necesidad de suplir su superación personal.
·
Acosador víctima es aquel que acosa a
compañeros más jóvenes que él y es a la vez acosado por chicos mayores o incluso
es víctima en su propia casa. Un ejemplo seria: Un chico que es maltratado en
su casa, va a la escuela y se desquita con otros
La
victima suelen ser niños tímidos, inseguros, mantienen una excesiva protección
de los padres, menos fuertes físicamente, etc. Las víctimas se pueden dividir
en dos y son:
·
victima pasiva suelen ser débiles físicamente
e insegura, por lo que resulta un objetivo fácil para el acosador. Otras
características de las victimas pasivas seria escasa autoestima, ausencia de
amigos, depresión, aunque algunos de estos rasgos podrían ser consecuencia del acoso.
·
Victima provocadora suele tener un
comportamiento molesto e irritante para los demás. En ocasiones, sus iguales
les provocan para que reaccionen de manera inapropiada, por lo que el acoso
posterior que sufren podrían llegar a parecer justificado. Un ejemplo seria: un
chavo que se cree brabucón que anda buscando pleito, hasta que encuentra a
alguien que no se deja y le pegan convirtiéndose él en la victima.
En
los espectadores corren el riesgo de insensibilizarse ante las agresiones
cotidianas y de no reaccionar a las situaciones de injusticia en su entorno. Como enfrentar la intimidación
y maltrato entre alumnos, los chicos y chicas deben saber que tienen derecho a
su integridad física y psicológica y que nadie puede abusar de ellos ni física,
ni psicológicamente, ni sexualmente. Deben conocer que las actitudes y
conductas no tienen que permitir en sus relaciones con los iguales y las
personas adultas. Han de prepararse para
afrontar conductas incomodas y las presiones del grupo. Romper la ley del
silencio sus relaciones ha de ser igualitarias no de prepotencia ni de dominio
o sumisión.
Deben
considerarse de que tienen que informar y dar a conocer situaciones de abuso
físico, psicológico que les sucedan y las que observen o sepan de alguno de sus
compañeros/as, tanto a los padres o familiares como al centro educativo. Los
espectadores deben mostrar una actitud de apertura, comunicación e interés por
la víctima. No posicionarse en el lado del acosador y hacer que la víctima se
lo cuente a sus padres o personas cercanas, incluso ofertar a ir con el si no
está seguro. Han de ser conscientes de la importancia de mantener relaciones
inter personales cordiales, positiva y mutuamente satisfactorias entre iguales.
Consecuencias de cada participante:
Ø El
agresor/a también está sujeto a consecuencias indeseadas y puede suponer para él/ella
un aprendizaje sobre cómo conseguir los objetos y, por tanto, estar en la
antesala de la conducta delictiva. Con ello el agresor/a consigue un
reforzamiento sobre el acto del dominio o sumisión como algo bueno y deseable y
por otra parte lo puede instrumentalizar como método de tener un estatus en el
grupo, una forma de reconocimiento social por parte de los demás.
Si
ellos/as aprenden que esa es la forma de establecer los vínculos sociales,
generalizaran esas actuaciones a otros grupos en los que se integren, donde
serán igualmente molestos/as. Incluso, cundo se vayan a emparejar, pueden
extender esas formas de dominio y sumisión del otro a la convivencia domestica,
como son los casos que lamentablemente vienen sufriendo con tanta frecuencia
las mujeres.
Ø Los
alumnos víctimas del bullying tienen consecuencias de deterioro a su
autoestima, ansiedad, depresión, fobia escolar e intentos de suicidio, con
repercusiones negativas en el desarrollo de la personalidad, la socialización y
la salud mental en general. Los que son causantes del bullying ósea los
agresores sus conductas de acoso pueden ser crónicas y convertirse en una
manera ilegítima de alcanzar sus objetivos, con el consiguiente riesgo de
derivación hacia conductas delictivas, incluyendo violencia doméstica y de género.
Estos
tienen consecuencias más nefastas ya que pueden terminar en fracasos y
dificultades escolares, niveles altos y continuos de ansiedad y más
concretamente ansiedad anticipatoria, insatisfacción, fobia a ir a la escuela,
riesgos físicos, y en definitiva conformación de una personalidad insegura e
insana para el desarrollo correcto e integral la persona.la imagen que tiene de
sí mismo/a puede llegar a ser muy negativa en cuanto a su competencia
académica, conductual y de apariencia física. En algunos casos también puede
desencadenar reacciones agresivas en intentos de suicidio.
Ø Los
observadores no permanecen libres de influencia respecto de estos hechos y les
suponen un aprendizaje sobre cómo comportarse ante situaciones injustas y un
refuerzo para posturas individualistas y egoístas, y lo que es más peligroso,
un escaparate para valorar como importante y respetable la conducta agresiva.
Fundamentalmente está en juego la educación moral y el posicionamiento moral
sobre lo justo y lo injusto, sobre si intervenir o no, sobre si ver agredir a
un igual de forma gratuita merece mi respuesta o no y hasta donde.
En
muchas ocasiones, el niño que desarrolla conductas de hostigamiento hacia
otros, busca el reconocimiento y la atención de los demás, de los que carece,
llegando a aprender un modelo de relación basado en la exclusión y el
menosprecio de otros .son ellos los protagonistas de casos muy extremos, como
suicidio, algunos estudiantes cuando se dan cuenta que el comportamiento
agresivo no trae ninguna consecuencia a quien lo practica, puede adoptarlo.
Es
necesario detectar y tomar medidas en las primeras etapas de la aparición de
este comportamiento, para actuar con antelación a que el problema sea
excesivamente grave e irreversible. Los profesores tienen el deber de observar,
detectar y actuar en este tipo de situaciones y deben forzarse en ello, tomando
medidas en pro de la acción anti-bullying, siendo conscientes de las
consecuencias en las victimas.
Las
maneras de combatirlo es intentar que los propios escolares reflexionen sobre
esta situación y tengan un juicio crítico sobre ella. Concientizar a los
docentes, estudiantes y familia. Generar cambios significativos en el ambiente
escolar, por medio de trabajo interdisciplinario. También generar
conversaciones y trabajos grupales, dentro de los grupos.
Desarrollar conciencia de la importancia
del vínculo profesor – estudiante y padres – hijo.
Los
niños que son victima de bullying se pueden distinguir cuando no quieren ir a la escuela, empiezan a
fingir tener malestares como dolor de cabeza, se aíslan del mundo ahí es donde
caen en depresión y les empieza a entrar la idea del suicidio, también suelen
tener conductas auto destructivas como hacerse daño con cortes, consumo de sustancias
y trastornos alimenticios, empiezan a decaer en sus estudios, a veces presentan
lesiones y visitas al servicio de salud seguido.
Cuando
un niño es víctima de bullying, los padres deben de intentar romper la llamada
“ley del silencio”. No esperar a que su hijo les hable de la situación de
acoso, si no que ellos mismos aborden el tema explicándole en qué consiste.
Deben de abordar el problema con serenidad. Esto hará que el niño sienta
seguridad y confianza.
La
prevención y erradicación del acoso escolar consiste en el compromiso de crear
un ambiente donde exista convivencia escolar en vez de exclusión, confrontación
o acoso. Se busca entonces crear ambientes escolares seguros, en donde los
estudiantes puedan progresar social y académicamente sin sentir temor. Para
ello es importante considerar medidas en las diferentes dimensiones de la
escuela en donde: profesores, padres de familia y niños se comprometan a ser
mas consientes del problema.
¿Qué hacer ante el bullying?
Acciones para disminuir la violencia
escolar:
Una
forma de disminuir los daños que la violencia puede causar, sería a través de
las siguientes acciones:
Mayor
presencia del personal docente y un trabajo con los alumnos respecto de los
objetivos que tienden a cuidar y respetar su propio ámbito escolar.
Estimularlos
a colaborar, integrarse y actuar cooperativamente mediante talleres de reflexión
y de intercambio, así como también la
puesta en marcha de jornadas voluntarias de trabajos tendientes a mejorar y
embellecer las instalaciones.
Incluir
a la comunidad, para que se sienta identificada con la tarea escolar.
Se
podrán proyectar películas y videos invitando a los distintos sectores de la
sociedad, repartir folletos, organizar charlas y debates.
Nivel
de intervención o tratamiento:
Serian
los procedimientos para corregir o mejorar la conducta antisocial o
perturbadora ya existente. El más utilizado es:
El
método de anatol pikas o también conocido como el reparto de responsabilidades
ha sido muy utilizado para disuadir a la persona o grupo. Se trata de entrevistas
con el agresor, los espectadores y la victima de forma individual, en las que
se intenta crear un clima de preocupación mutua o compartida con el fin de
acortar estrategias individuales de ayuda a la víctima.
El
objetivo de la intervención es conseguir que los miembros del grupo, de forma
individual, tomen conciencia de la situación que están viviendo y se
comprometan a realizar una serie de acciones que mejoren su situación.
·
Detectar
Para
los profesores es difícil detectar un problema de agresión como el bullying por
que no suelen ocurrir en su presencia.
Es
importante tener en cuenta los tipos de maltrato que puede haber (maltrato
físico, maltrato psicológico, maltrato social), que nos pueden dar pistas de si
existe bullying en nuestro centro escolar.
Las
características psicosociales de los alumnos victimas y “bullies” también nos
dan indicios de posible agresión.
Para
poder detectarlo es útil:
Aumentar
la observación en lugares poco frecuente (patios, rincones de pasillo, entre
clases, actividades extra escolares...)
Recoger
información de distintas fuentes (profesores, familias, alumnos…)
Tener
estructuras en el centro educativo donde expresar denuncias y reclamaciones
(buzón de sugerencias, comisión de convivencia,…)
·
Evaluar
necesidades y recursos.
Identificar
a los alumnos afectados
Valorar
sus necesidades
Identificar
zonas, lugares y situaciones de riesgo
Valoración de los recursos
humanos (profesores, alumnos, familias,…)
Valoración de los recursos
materiales (audiovisuales, buzón de sugerencias…)
·
Actuar
Intervención con la victima
Ser cauteloso en la
aplicación de medidas y en la realización de algunas acciones para no exponerla
a situaciones de riesgo.
Evitar el tratar
públicamente la situación de acoso.
Proteger a la víctima
durante todo el proceso de intervención:
o
Aumentando la supervisión y vigilancia del
profesor durante los descansos, recesos, loncherías, baños, entradas y salidas
del alumno.
o
Creando grupos de compañeros solidarios
(formados y determinados previamente) para acompañar a la víctima,
fundamentalmente en los momentos de mayor riesgo.
Establecer reuniones
individuales con la víctima y con otros compañeros que favorezcan la
comunicación y la libre expresión.
Desarrollar programas
específicos de habilidades sociales (defensa de los propios puntos de vista,
asertividad, defensa de derechos, petición de ayuda…)
Intervención con el agresor.
Asegurarse de que los
agresores reciben también la ayuda que necesitan.
La agresión puede ser debida
a una falta de habilidades sociales adecuadas para interactuar con sus iguales,
han aprendido que la relación interpersonal se rige por un esquema de dominio-sumisión.
Diseñar y realizar
entrevistas individuales en las que se analice la situación y sus consecuencias
para los afectados.
Definir muy claramente los
comportamientos que no se toleran estableciendo los límites de lo permitido.
Ayudarle a entender cómo se
siente el niño agredido (empatía).
Desarrollar programas de entrenamiento
intensivo en habilidades sociales (asertiva, identificación y resolución de
conflictos…)
Ayudarle a vincularse con
los demás sintiéndose parte del grupo y del entorno y asumiendo las responsabilidades
que le correspondan.
Aplicar programas de
modificación de conducta: consecuencias negativas, reparación y restauración del
daño, perdida de la posibilidad de realizar algunas actividades (salidas,
campamentos…).
Aplicar técnicas cognitivas
(entrenamiento en autocontrol…)
Intervención con los observadores
Ser denunciados.
Analizar las consecuencias
que estos comportamientos tienen para todo el grupo.
Definir claramente cuáles
son los papeles que los observadores juegan en estas situaciones.
Enseñar a los alumnos a pedir
ayuda, a superar el miedo a ser calificados de chivatos o incluso a convertirse
ellos mismos de victimas.
Informar sobre la
posibilidad y recursos existentes en el centro, para denunciar situaciones de
intimidación garantizándose la confidencialidad (teléfono amigo, buzón de
sugerencias, comisión de resolución de conflictos…)
Intervención en el grupo de clase
Hacer saber al alumnado que
no se van aceptar agresiones de ningún tipo.
Elaborar proyectos anti
violencia: campañas, concursos de slogan…
Enseñar a poner nombre y
expresar los sentimientos
Crear y estimular un clima
escolar de rechazo a los malos tratos (violencia de género, bullying…)
Poner en marcha actividades
de tutorías ya diseñadas por otros autores
Crear grupos de ayuda:
supervisores, tutores, maestros, ayudantes de clases,…
Favorecer el establecimiento
de vínculo positivo entre los alumnos y la aceptación de las responsabilidades
personales y grupales.
Fomentar el trabajo en
equipo del grupo con actividades diversas (fiestas, proyectos, semana
cultural…)
Fomentar en el alumnado
formas sanas de compañerismo y solidaridad.
Favorecer la integración de
todos los alumnos en el grupo y el desarrollo de habilidades pros sociales a
través de trabajos cooperativos.
Intervención con las familias
Contar necesariamente con
todas las familias afectas y solicitar su colaboración. Evitar que los padres
se sientan poco respaldados y tomen iniciativas individuales, que pueden
agravar la situación de su hijo.
Mantener reuniones individuales
con cada una de las familias de los afectados para informarles sobre la
situación y las medidas adoptadas por la escuela. Evitar buscar culpables y
tener a obtener compromisos positivos.
No se aconseja tratar estos
temas en reuniones generales de padres de familia.
Ayudar a las familias a
analizar la situación de forma realista, sin minimizar los hechos, ni
sobredimensionar las consecuencias.
Dar a las familias espacio y
oportunidades para hablar de sus sentimientos.
Orientar a las familias para
fomentar el diálogo permanente padres-hijos.
Ofrecer pautas que ayuden a
fomentar de forma adecuada la situación de su hijo.
Resaltar la importancia de
mantenerse alerta ante los comportamientos de los hijos.
Mantener una relación fluida
y continua la comunicación entre la escuela y la familia con el objeto de
coordinar la intervención.
Prevención
de nuevas agresiones.
Creación de difusión de
estructuras y recursos para recibir denuncias, reclamaciones y quejas (buzón de
sugerencias, teléfono amigo, comisión anti bullying)
Formación del profesor en el
manejo de conflictos y enseñanzas de habilidades de interacción personal y
social.
Formación del alumno en
habilidades que le permitan interactuar de forma adecuada (escucha activa, defensa asertiva de opciones,
peticiones, rechazos…)
Crear comisión de alumnos
que se impliquen en el desarrollo de la convivencia positiva en la escuela, con
representantes de todos los niveles
Implicar a los padres para
que participen en las estructuras y medidas de mejora de la convivencia en la
escuela.
Consejos
para victimas
1.-
Aprende a comunicarte
Una de las claves para
lidiar con el acoso, es aprender a comunicarte con tus compañeros. Piensa
quienes son los que te molestan frecuentemente y afréntalos para buscar una solución
común y, sobre todo, para demostrarle que no les tienes miedo.
2.-
Trabaja en tu autoestima
Las victimas de bullying
suelen ser jóvenes con el autoestima baja. Trabaja en tu autoestima para
sentirte bien y recordarte a ti mismo que eres una persona valiosa y no mereces
ser denigrada y molestada por nadie. Si
tienes muchas dificultades para hacerlo, considera consultar con un
especialista en la materia.
3.-Hazte
nuevos amigos.
Piensa que las personas que
pierden el tiempo insultándote o burlándose de ti no merecen tu atención, ni tu
amistad. Si te estás juntando con un
grupo problemático, considera hacerte nuevas amistades. Ellos también serán tus
aliados a la hora de luchar contra el acoso escolar.
4.-
No respondas con violencia
Es un hecho probado que la
violencia genera más violencia, por eso cuando somos violentados tendemos a
responder de la manera errónea. Recuerda que la violencia no lleva a ningún
lado y darle un puñetazo a un compañero puede generarte mas problemas con las
autoridades de tu colegio.
Conclusión
El bullying es un fenómeno
que se conoce desde hace mucho tiempo. Sin embargo, desde hace unos años las
conductas violentas se están haciendo cada día mas presentes tanto en el ámbito
educativo, familiar y social. Por lo que resulta vital investigar más afondo el tema para poder generar el cambio.
Las investigaciones
realizadas en el mundo sobre la violencia escolar, han permitido establecer cuáles
son las formas de violencia más extendida en el ámbito escolar.
A pesar de que existe una
gran cantidad de publicaciones sobre el tema, se hace difícil definir
procedimientos o programas de intervención universal, ya que la dinámica de
este tipo de situaciones está marcada por la influencia del grupo escolar.
La violencia en las aulas se
ha ido incrementando a nivel mundial, los centros educativos se han convertido
en un campo de batalla de todos contra todos, situación que está presente en
las instituciones educativas que no hace diferencia de etnias, zonas urbanas o
rurales, escuelas privadas o públicas, chicos y chicas, etc.
La violencia escolar es uno
de los tantos síntomas de la crisis de valores de la sociedad. No es problema
de ciertos menores, sino que estos, son a su vez expresión de la crisis
familiar y social. Se requiere trabajar con los menores y sus familias al igual
que con sus maestros.
El acoso escolar “bullying”
produce efectos nocivos en las victimas como es el deterioro de la autoestima,
depresión, trastornos de ansiedad, fobia, e intentos de suicidio, con
repercusiones negativas en el desarrollo de la personalidad, la socialización y
la salud mental en general.
El acoso escolar es un
problema real y los efectos que genera esa intimidación ocasionan problemas en
la salud física y emocional de los estudiantes.
Las escuelas no son las
culpables de acoso escolar y no es cuestión de buscar a los culpables, pero si
es importante que los colegios contribuyan a su prevención, detección y
tratamiento médico y psicológico.
Hoy más que nunca se debe
tener una buena comunicación de hijo – familia – escuela.
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